No démosle fuerza al dolor intruso,
Ni démosle fiesta al sentido mortal,
Lo real nunca huye,
De la esencia infinita;
Más bien busca y destruye,
A ese antiguo portal.
Y entre tantos que caminan,
Vemos sombras al pensar,
Y aunque luces predominan,
Siempre es tenue su pasar.
Cuando el aire no sea viento,
Y el humano un ser normal,
Cesará la sed y tormento;
Y habrá bien en vez de mal.
Agosto 2024